En 2017, Marta García Aller publicó su libro El fin del mundo tal y como lo conocemos (Planeta, 2017), un libro imprescindible para entender los cambios inevitables que están transformando nuestras vidas. Me hizo mucha ilusión leerlo, sentía gran curiosidad por conocer, tal y como aparecía en su la portada, “las grandes innovaciones que van a cambiar tu vida”.

A la autora de este libro le pareció más esclarecedor dibujar el futuro identificando las cosas que han dejado o dejarán de existir. Ella hacía referencia por ejemplo a cómo “las nuevas tecnologías han propiciado el fin de hábitos que antaño parecían inmutables, por los tiempos de los tiempos, como el de consultar la enciclopedia que ocupaba el lugar de privilegio en las estanterías del salón”.

¿Debemos intranquilizarnos ante la situación de cambio que estamos viviendo? Marta García Aller nos decía en su libro que “el futuro no está escrito, así que estamos a tiempo de hacer las cosas bien. Todavía tenemos margen de maniobra para afrontar los grandes retos que se avecinan”.

Las palabras de Marta parecen tranquilizadoras. Sin embargo, desde antes de la pandemia, nos bombardean noticias describiendo el entorno social en el que vivimos con los acrónimos VUCA (Volatilidad, Incertidumbre, Complejidad, Ambigüedad) y BANI (Fragilidad, Ansiedad, No lineal, Incomprensible). Y ante el contexto actual, marcado por tanta incertidumbre y caos, en el que se están produciendo grandes y vertiginosos cambios culturales, tecnológicos y económicos, las empresas necesitan ser cada vez más flexibles en todas las facetas del negocio, desde las operaciones a los espacios de trabajo. Por ello debemos implementar estrategias que nos permitan afrontar este entorno complejo e imprevisible, que ya hoy, es una realidad.

El mundo del trabajo se encuentra en una era de constante transformación, siendo el mercado laboral muy dinámico y exigente. Muchos autores hablan de una cuarta revolución industrial o 4.0, marcada por una constante volatilidad e incertidumbre. Las personas, acostumbradas a una manera de proceder y trabajar caracterizada por la razón, la rigidez, la resistencia, la jerarquía y la competitividad, nos damos cuenta de que esa manera de funcionar no sirve, no se adapta a lo que el entorno y las empresas demandan.

Por ello, si bien cada sector y profesión demanda unos conocimientos específicos, habilidades y técnicas concretas, existen competencias transversales que todos los profesionales deben reunir si quieren desenvolverse con solvencia en este nuevo mercado de trabajo.

La Fundación Adecco ha redactado una Guía ilustrada 20 competencias contra la exclusión en el nuevo mercado laboral que recoge las 20 competencias que marcarán el rumbo del éxito profesional durante los próximos años. Y es clave desarrollarlas e incorporarlas a la marca personal de los profesionales. Randstad hace referencia a 16 competencias transversales que es necesario adquirir y desarrollar para atender a la demanda de las empresas en este nuevo escenario.

Vamos a intentar agrupar y explicar de forma sencilla las competencias que demandan, hoy en día, las empresas:

  • Interés por aprender: En este momento el aprendizaje tiene que ser continuo, la rutina no vale, más bien tenemos que estar constantemente adaptándonos. Ha surgido un nuevo término, knowmads (nómadas del conocimiento), en la actualidad tenemos que estar dispuestos a reinventarnos continuamente.
  • Curiosidad y creatividad: Las empresas demandan personas curiosas porque favorece la comprensión y capacidad de aprender nuevos procedimientos. También la creatividad ha cobrado gran importancia, ya que ante este escenario tan imprevisible es necesario un pensamiento disruptivo e imprescindible tener ideas originales y diferentes.
  • Iniciativa y proactividad: Es más necesario que nunca contar con trabajadores decididos, entregados, que dejen a un lado los miedos y se atrevan a dar pasos hacia adelante.
  • Resiliencia y tolerancia al estrés: En el entorno social actual surgen constantemente dificultades, por lo que se hace necesario contar con profesionales que no se asusten con la adversidad, sino que más bien sepan actuar con perseverancia y salir fortalecidos. Por otro lado, ser capaz de trabajar bajo ciertos niveles de estrés y presión es necesario para alcanzar los objetivos.
  • Comunicación eficaz y espíritu colaborativo: Debido a la complejidad de los proyectos, cada vez es más necesario el trabajo en colaboración con diferentes profesionales especializados en áreas concretas.
  • Competencia digital: El mercado laboral del presente y del futuro ya no se concibe sin las tecnologías y cualquier puesto de trabajo exige tener capacidad para utilizarlas.
  • Autonomía y orientación a resultados: Las empresas buscan personas eficientes, que aprovechen su jornada de trabajo y pongan el foco en sus objetivos, siendo necesario que tengan capacidad para
  • Liderazgo y motivación: La actitud es clave para lograr los objetivos, si existe pasión los logros se multiplicarán.
  • Empatía y respeto a la diversidad: Las organizaciones buscan incorporar a sus plantillas profesionales que sean conscientes de la realidad en la que vivimos, diversa por naturaleza, y que sepan interrelacionarse sin ningún tipo de discriminación.

 

¿Estás preparado para adquirir y desarrollar estas habilidades? Es necesario no dejarlo para más adelante y ponerse a trabajar ahora o corremos el riesgo de quedarnos fuera del mercado laboral.

¡Empieza ya a formular propósitos, y definir objetivos SMART (específicos, medibles, alcanzables, reales y medibles en el tiempo) que favorezcan desarrollar estas competencias y hagan posible tu éxito personal y profesional!

 

Pilar Gutiérrez Franco

Abogada y Orientadora Profesional

Docente de EFA Valdemilanos, módulos de FOL y EIE